Los nacidos el 3 de noviembre son luchadores capaces de resistir y seguir adelante cueste lo que cueste. Son muy competitivos y lo demuestran no sólo rivalizando con otros sino también esforzándose por alcanzar sus metas personales. Poseen una necesidad innata de mejorar su posición. Aunque suelen conservar la entereza en situaciones críticas, a menudo tienen una faceta explosiva. La serenidad que aparentan en situaciones críticas no es un buen presagio para sus adversarios. Tanto las mujeres como los hombres nacidos este día son implacables cuando atacan al enemigo.
Los nacidos este día saben esperar. No se precipitan nunca y creen que el tiempo juega a su favor. Es probable que quienes los rodean tengan la impresión de que postergan sus acciones, pero lo cierto es que esperan el momento más adecuado para entrar en acción. En consecuencia, rara vez son derrotados debido a una maniobra impulsiva o prematura. Sus tácticas tomarán por sorpresa a sus oponentes, pero no por su precipitación, sino porque han sido meticulosamente calculadas.
A estos individuos no les gusta perder. De hecho, su obsesión por ganar puede causarles muchos problemas. Una racha de mala suerte en el ámbito sentimental o económico puede desmoralizarlos, conducirlos a la depresión y, en casos extremos al suicidio. Por lo tanto, estos individuos no son ganadores sino «sufridores»; pueden sumirse en la desesperación, encerrarse en sí mismos y demostrar su estado a los demás con una mirada ceñuda. Por otra parte, cuando están de buen humor pueden ser extremadamente joviales. En esas ocasiones, su euforia puede rayar la manía.
Los nacidos el 3 de noviembre tienen una gran capacidad de concentración y unas facetas física y mental muy desarrolladas, pero la expresión de los sentimientos a menudo se encuentra bloqueada. Construyen una barrera para que nadie acceda a sus pensamientos o sentimientos más profundos, resistiéndose así a un análisis personal. Sin embargo, pueden ser muy comprensivos con los problemas de los demás. A pesar de ser muy profundos, rara vez se preocupan por desentrañar sus conflictos más íntimos.
Los nacidos este día se crean enemigos peligrosos, no sólo por su presencia física y sus inteligentes tácticas de combate, sino también porque tienen una vena sarcástica y satírica. Son muy capaces de destruir a un adversario con su elocuencia. Estos individuos deberían controlar su faceta agresiva y expresar sus emociones de una forma más armoniosa y fluida. Si desean avanzar en el camino del desarrollo personal y espiritual, es importante que combatan su intolerancia y aprendan a ser más indulgentes, flexibles y abiertos.
