Astrología familiar: los padres

Aliados o rivales de sus hijos

Cada nativo posee un estilo propio para educar a sus hijos. Todos intentan ser los mejores padres, pero son los astros quienes deciden muchos de sus comportamientos cotidianos.
Los padres pueden ser divertidos, posesivos, compinches, aburridos, permisivos o muy severos. Algunos proyectan en sus hijos sus propias frustraciones de la infancia y otros tratan de transferirles lo bueno que han heredado de sus padres. Cada persona posee ciertas características que determinan como será su rol de padres y eso dependerá, en parte, de las influencias de los astros. En esta nota, le mostramos cómo es el padre típico de cada signo. De esta manera, usted podrá evitar ciertos errores, minimizar sobre exigencias, resolver esos conflictos que lo mortificaron de pequeño y poner atención en lo que no está haciendo. Recuerde que un hijo feliz depende principalmente del trato que reciba de sus padres. Sea justo, enséñele respeto hacia los demás y, sobre todo, ofrézcale su amor incondicional. Su hijo se lo agradecerá cuando crezca.

Aries : que sepa defenderse

Aries hará lo posible para estimular la independencia. Permitirá a su hijo experimentar y correr riesgos. El problema es que no es muy bueno para transmitir seguridad. A veces, reacciona con impaciencia cuando su hijo se muestra muy dependiente. Un niño introvertido los confunde, ya que no pueden entender que alguien sea tímido y poco competitivo. Deben aprender a respetar el ritmo de cada niño.

Tauro: un poco de respeto

Tienen ideaos algo anticuadas sobre lo disciplino. Esperan ser respetados y no estimulan la independencia de sus hijos. Son los podres que esperan que los chicos sigan el mismo camino que ellos, en especial, con relación a los negocios o la profesión. Trabajan mucho para asegurarles una gran educación. Por ello, estos hijos disfrutan de poca libertad para elegir su propio comino. La clave: la tolerancia.

Géminis: el vuelo del pensamiento

Los padres de Géminis no tienen problemas en dejar cosos de lado para jugar con sus hijos. Además, valoran lo educación y no pueden vivir sin información y comunicación. Por lo tanto, suministran a sus hijos muchos libros y estímulos intelectuales. Pueden presentarse dificultades cuando el hijo es práctico, pero no cerebro!. Un consejo para ellos es que no les exijan tanto y los escuchen más.

Cáncer: hora de ir a casa

Los Cangrejos aman ser padres. La madre tiene instintos maternales especialmente fuertes, es empalagoso y castradora. Tienen una fuerte tendencia a mirar hacia el pasado y desear que las cosas sigan siempre siendo iguales. Como consecuencia, a veces, se niegan a aceptar que sus hijos están creciendo. También, pueden ser muy ambiciosos respecto a sus logros materiales. La clave: relajarse más.

Leo: a jugar y divertirse

Les encanta jugar con sus hijos (teniendo ellos mismos uno personalidad algo infantil). Leo es un signo cariñoso y divertido y, a pesar de su carácter suele ser tolerante con los niños. El estilo educativo de los Leones puede ser, a veces, demasiado vigoroso para los niños más «delicados»; pero los Leo disfrutan genuinamente siendo padres. Un consejo: menos miedo y más diversión con ellos.

Astrología familiar: los padres

Virgo: cuidado y orden

Procuran que sus hijos sigan una rutina ordenado y precisa, dado que lo consideran una forma de protección. Se preocupan mucho por la salud; tienden a llevarlos al médico y tienen en casa muchos remedios o mano. Aunque quieren comprender o sus hijos, pueden sentirse perplejos frente a un niño muy emocional. Pero, son grandes podres y sienten devoción por sus hijos.

Libra: buenas costumbres

Los padres de Libra tratan de asegurarse que sus hijos sean prolijos y tengan valores estéticos. Ellos quieren enseñarles las buenas costumbres de la vida, que van desde apreciar arte hasta saber cocinar. Hablan mucho con ellos, son muy flexibles y los dejan experimentar sin problemas. Consejo: no se preocupen tanto por la posición o el agrado de gente del entorno.

Escorpio: afecto y obediencia

Los escorpianos tienen una necesidad innata de mandar. Este signo puede ser realmente exigente, aunque también suele tener un lado sorprendentemente gentil cuando trata con un niño tímido y asustado. Este podre tiende a imponer una disciplina estricta, y es el más duro de todos los signos cuando se trata de resistirse a los caprichos. Pero aman profundamente a sus hijos y siempre buscan su bienestar.

Sagitario: estudio y diversión

Ofrecen un hogar estimulante, lleno de libros y juguetes e impulsan a sus hijos a ser aventureros.. Valoran la educación y los estimulan para que estudien, sin tener en cuenta si éstos sienten interés. Para los Centauros, el deporte es una religión y esperarán que sus hijos sean igualmente activos. Tienen dificultades para controlar a niños rebeldes, porque valoran la libertad y desean dársela a sus hijos.

Capricornio: portarse bien

Abren a sus hijos todos los cominos que llevan al éxito, incluyendo viajes oí extranjero y los mejores colegios. Valoran las convenciones y tratan de asegurarse que sus hijos crezcan con un fuerte sentido de la disciplina. Tienden a empujarlos a progresar, pero el niño necesitado de afecto puede sufrir por falta de cariño. Los padres Cabra necesitan recordar que la disciplina y el dinero no lo son todo.

Acuario: ganas de inventar

Acuario es una mezcla curiosa de puntos de vista progresistas y conservadores. Hablan de cualquier tema con sus hijos, pero nunca cambian sus propias opiniones. Estimulan la autoexpresión, pero no soportan las críticas y pueden ser bastante autoritarios. Siguen las últimas teorías sobre la educación. Sus hijos los adoran y se sienten fascinados por lo que les ofrecen. Consejo: más tolerancia y calma.

Piscis: tiempo de fantasías

Captan los necesidades de sus hijos, siempre que estén en su mismo longitud de onda. Si el niño es cerebral, el progenitor Piscis tiene pocos puntos de contacto con él. Pero, para el niño que comparte el enfoque pisciano, el padre puede ofrecer el más maravilloso y fascinante de los mundos. Tienen dificultades para imponer disciplina, por lo que son fácilmente manipulables. La clave: equilibrio y límites.