Los nacidos el 17 de agosto son individuos poderosos y explosivos. Tienen el alto voltaje de los nacidos el día anterior, con los que comparten muchas características, pero a diferencia de ellos les interesa dominar. Tanto las mujeres como los hombres nacidos este día son autoritarios por naturaleza y no admiten oposición (ya sea en el papel de padres, maestros o incluso amigos). De hecho, pueden surgir problemas cuando los demás se resisten a aceptar su actitud dominante.
Paradójicamente estos individuos pueden tener un carácter tranquilo, incluso retraído, y una gran necesidad de proteger su vida privada. Pretenden que fuera de su trabajo o de su círculo social se los deje solos. Aunque a veces son muy extrovertidos —quizás «el alma de la fiesta»— rara vez adoptan una actitud exhibicionista y no derrochan sus energías en grandes alardes.
Aunque tienen un aire refinado y encantador, saben imponerse y mantener a sus admiradores a distancia.
Uno de los mayores retos que deben superar es el de controlar su afición por las discusiones y la tendencia a atacar y defenderse alternativamente. Si no controlan estos impulsos, corren el riesgo de crearse enemigos y distanciarse de familiares y amigos. Aquellos que los aman y los comprenden procurarán tolerar esta energía desenfrenada y perdonar las palabras y los actos explosivos. Pero los nacidos este día casi siempre llegan a extremos difíciles de tolerar.
Desde el punto de vista psicológico, esta conducta oculta inseguridad y un complejo de inferioridad que suele iniciarse en la infancia. Casi todos los nacidos este día han tenido problemas con uno de sus progenitores (a menudo el del mismo sexo) al que han odiado y adorado alternativamente. Además, es probable que no se hayan tomado la molestia de conocerse, razón por la cual se retraen o se sienten frustrados ante los reveses de la vida en lugar de aprender de la experiencia. Una psicoterapia podría ayudarlos a comprenderse mejor.
Debido a su naturaleza compleja y a sus razonamientos complicados, estos individuos versátiles tienen mucho que ofrecer cuando son capaces de controlar sus energías.
Aunque los nacidos el 17 de agosto rara vez actúan con malicia, pueden dejarse arrastrar por fuerzas que no controlan y que a menudo bullen en su interior. Las técnicas de control mental pueden ayudarles a dominar estas energías huracanadas (por ejemplo, enseñándoles a identificar las señales de advertencia y a atajar los vientos antes de que se desate la tormenta).
