Los nacidos el 20 de junio suscitan emociones fuertes en los demás. Los más excepcionales pueden incluso experimentar o hacer que otros experimenten una pérdida de razón o un estado de trance. En casos extremos dicho estado puede ser extático, incluso histérico. No es raro que estos individuos posean facultades paranormales y dotes para la adivinación.
De hecho, los nacidos este día deben proteger su cordura. Periódicamente necesitan analizar sus razonamientos, que no suelen ser lógicos y están fuertemente influidos por las emociones. A los nacidos este día les gusta convencer a otros. Por desgracia, es posible que no sean tolerantes con las ideas contrarias a las suyas, a las que ven como amenazadoras. En efecto, estos individuos desearían que su círculo social apoyara sus puntos de vista a menudo extremistas.
Por muy sensatas y racionales que parezcan las personas nacidas este día, siempre ocultan una faceta irracional. Por eso provocan un torbellino de emociones y entusiasmo a su alrededor. Es probable que ni ellos ni los que los rodean adviertan hasta qué punto sus tendencias inestables y aventureras son resultado de fuerzas profundas, inherentes a la naturaleza de los nacidos el 20 de junio. Esto no significa que su vida tenga que ser necesariamente caótica. De hecho, los poderes «mágicos» de estos individuos les permiten no sólo generar emociones, sino también controlarlas y dirigirlas.
A pesar de producir un fuerte impacto sobre los sentimientos de sus padres, amigos, hijos y otros seres próximos, los nacidos cerca del solsticio de verano no suelen darse cuenta de la magnitud de su influencia. Por eso es posible que los demás obedezcan sus sugerencias, preferencias y deseos de manera inconsciente. En consecuencia, los nacidos este día deberían tomar conciencia de su poder —por mucho que prefieran negarlo— y evitar hacer daño con él.
Aunque estos individuos son hipersensibles, no siempre se preocupan por los sentimientos ajenos. Es importante que se esfuercen por cultivar las sencillas cualidades humanas de la bondad, la consideración y la tolerancia, al tiempo que investigan las causas profundas de sus celos, furia o envidia. Los nacidos el 20 de junio deben aprender a expresar sus emociones libremente, aunque con moderación, y buscar la paz dentro y fuera de sí.
