Los nacidos el 21 de mayo no sólo tienen grandes visiones, sino también la tenacidad necesaria para hacerlas realidad a toda costa. Cuando se enzarzan en una lucha, no ceden, por grandes que sean las dificultades. De hecho, aman los retos, y los obstáculos no hacen más que estimularlos.
En este sentido se diferencian de muchas «personas de ideas» que se rinden con facilidad, pierden interés o siguen adelante por inercia. Los nacidos este día quieren aplicar sus ideas, llevarlas a la práctica.
Son muy sensibles a los elementos táctiles, sensuales y físicos de la vida. Sus ideas y visiones casi siempre están relacionadas con la transformación de la materia física.
Estos individuos también se interesan por la vida social. No se limitan a soñar encerrados en una torre de marfil, sino que van al fondo de las cosas, combatiendo con o contra la sociedad por lo que consideran justo. Aunque su cruzada suele ser personal, también se entregan desinteresadamente a las causas de otros. Su fuerte es dar, no recibir, de modo que les cuesta aceptar regalos o ayuda. En este sentido, su vida es estrictamente una interpretación para un único actor, en la que el trabajo ocupa la posición central. No necesitan un representante o relaciones públicas: les gusta hacer las cosas solos desde el principio al fin.
Casi siempre consiguen el dinero que necesitan para hacer lo que quieren, aunque sea en el último minuto. Su confianza en el éxito de sus empresas es tan grande, que la ayuda y los medios necesarios parecen materializarse de la nada cuando hace falta.
Aunque pueden luchar durante años sin alcanzar el éxito, o ser víctimas de las burlas y el desprecio de los demás, nada los desvía de su camino. Debido a su personalidad dominante, nunca son tan felices como cuando dirigen a otros. Los menos evolucionados de los nacidos este día sufrirán en silencio toda la vida, pues aunque tengan ideas y dotes extraordinarias, son incapaces de expresarlas.
Estos individuos suelen conformarse con apoyar a su pareja, sus hermanos o sus hijos, pero inevitablemente acumulan resentimientos y acaban cayendo en la autocompasión. Sólo necesitan valor para actuar, ya que si lo hacen triunfarán como los más evolucionados de los nacidos este día. En parte, la falta de confianza en sí mismos obedece a su incapacidad para reconocer cuál es su auténtico talento.
En el mejor de los casos, el 21 de mayo es un día de conquistas y éxito. Sin embargo, los nacidos este día deben tener cuidado con la arrogancia y el egocentrismo, o con sucumbir a la tentación de adoptar el papel de mártires o de santos. Necesitan examinar periódicamente sus motivaciones personales para asegurarse de que son tan desinteresados y generosos como parecen.
También deben aprender que dar y recibir son dos caras de la misma moneda, y que aceptar ayuda de los demás también forma parte de la naturaleza humana. Tienen que huir de la vanidad en todas sus manifestaciones y evitar dar como si estuvieran haciendo un favor a personas inferiores.
